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En 1962, Alejandro Serrano, en calidad de diputado consiguió el presupuesto necesario para la siembra de césped en la cancha del estadio, pues en ese entonces la cancha era de tierra  que era una amenaza e incómodo para sus jugadores. La siguiente obra más destacada fue el drenaje para filtrar el agua dentro del campo del juego. Gracias a sus estudios realizados le permitió la supervisión de la obra.

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Para la inauguración del estadio en 1964, se disputó un partido entre Peñarol de Uruguay y la Liga de Quito, porque en la ciudad de Cuenca no existía un equipo profesional de fútbol.

El 23 de mayo de 1971 se reinauguró el estadio, conjuntamente se hizo la presentación oficial del Club Deportivo Cuenca, desde entonces la ciudad ya contaba con un equipo profesional de fútbol.

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En el año de 1980, se realizó la instalación de las cuatro torres de iluminación, posteriormente en 1985 para los Juegos Bolivariano se colocó un marcador electrónico    fabricado en Hungría.

Actualmente, el estadio atesora 56 años y cuenta con una extensión para 20.730 espectadores en total.